miércoles, 14 de mayo de 2014

Soltar

Las sensaciones la tomaron completa.  Pensar, en este punto,  ya no era una opción.  Cerró los ojos y se dejó ir. "Debería hacer esto más seguido" fue lo último que su mente logró articular.

Hacía tanto tiempo no se sentía así, esa necesidad que le recorría el cuerpo,  ese misterio de no saber qué va a suceder, la ansiedad desesperada de rozar otra piel. Electrificante. Se había olvidado por completo de esa sensación. Y la disfruto, y no pensó.  Y la luna brillo toda la noche.

lunes, 12 de mayo de 2014

Tensión creativa

Tensión creativa. Así le llama mi psicologa, supongo que hablamos de lo mismo.  Yo me refiero a eso que físicamente es como un fuego en el pecho, algo que arde, que vive. Es eso que cuando te olvidas que estás vivo y te pones gris te da una sacudida y te arranca con fuerza del pozo más hondo. Aunque te estés revolcando, aunque te resistas. Animicamente, en lo cotidiano,  es esa sensación de querer completar todo, de ver la maravilla en cosas comunes y querer plasmarla, la necesidad de que quede grabado, que no se pierda. Es leer un libro y sacar, poner,  emocionarse por la sensación de que alguien dice algo que te resuena,  que te gustaría haber dicho.  Y de nuevo querer guardar. Atesorar esa magia que ves. Es querer guardar hasta  conversaciones, porque sabes que ahí hay pura esencia y que eso no se tiene que perder. Tensión creativa, es quizá el mayor de mis desvelos, que suenan poéticos pero también son incomodamente cotidianos, pero que valen la pena porque aunque sea tanto, aunque nadie te enseñó a canalizar,  aunque desespere y se sienta raro, es lo que me hacer estar viva.

miércoles, 28 de septiembre de 2011

Becquer

Y si imito a Becquer...

Y si en este viaje, ahora,

Y por caminos diferentes

Chocásemos

Que me dirías?

Si te cruzase mañana

Y me olvidara de saludarte,

Si me vieses altiva y distante

Qué me dirías?

Si por el contrario

Corriera a abrazarte

Y te contara cuánto te extrañé,

Si te besara un instante

Y me largase a llorar..

Qué me dirías?

Si me atreviese a reconocer

Que no concibo la idea

de olvidarte algún día,

si reconociese el poder

de tu presencia en mi, cada mañana

si hubiese velado por tu ausencia

cada noche desde aquel día

y de repente al verte, lo reconociese

qué me dirías?

Y si te cruzo un día, en unos años

Y al verte por la calle vos estuvieses

Distante, altivo

Si yo al ver tus ojos

reflejados por el sol

Y tu mirada se clavase

sin querer en la mia

Y si volvieses a mirar

a quien a tu lado camina

Y mi corazón se sintiera incapaz

de seguir con su vida

Y mi alma albergara mil penas

Y en un destello fugaz

tu mirada en mis venas

Me quitara las respiración

Y frente tuyo nuevamente cayera.

Qué me dirías si así me vieras?

jueves, 25 de marzo de 2010

No soy de acá.

No soy de acá, lo siento todo el tiempo. No soy de este lugar, de esta gente, de las cosas que se hacen, no soy de estos aparatos, de los médicos, de la televisión, no soy del celular, de los negocios, de los colegios, ni de la ropa, ni de los ventiladores y aunque estaba segura del aire acondicionado descubrí que tampoco soy de eso así que no me queda más ninguna duda que no soy, no soy de las relaciones personales, de buscar, de pintar, no soy de pasear ni de mirar paisajes, no soy de los dibujos y las cartas ni del pelo de colores, no soy de los tatuajes ni de los aros ni de la risa fuerte, no soy de los cigarillos ni de las fiestas, no soy de las uñas ni de las páginas en donde escribo que no soy, ni siquiera soy de escribir ni de mirar por la ventana, no soy de las bicicletas ni de los autos ni de los que tienen alas, no soy ni voy a ser aunque todo eso lo haga porque hay un error en algun lado, algun número se pifió, o dejaron que algun pánfilo se ocupe cinco minutos del universo y mirá, acá estoy yo que no soy y algunos más que tampoco y nos miramos y nos entendemos pero después nos olvidamos entre tantos ruidos de bocinas del tren y luces que parpadean, y entonces seguimos como siendo, como mirando, como jugando, como riendo hasta que nos volvemos a cruzar y nos miramos como diciendo "no somos" y eso nos calma un poco, pero después nos enloquece porque por unos días seguimos recordando que estamos acá sin ser, porque somos de los que ni respiramos y estamos dele respirar.